D-F

Demonio: espíritu invisible malvado que tiene poderes sobrehumanos. Los demonios son ángeles caídos que ayudan a Satanás en la oposición a Dios; son malignos (Lucas 10:17-18), poderosos (Lucas 8:29), y se hallan bajo el poder de Satanás, su príncipe (Mateo 12:24-30). Ellos reconocieron a Cristo (Mar. 1:23-24) y pueden poseer a los no cristianos (Mateo 8:29).

Depravación total: es la doctrina que describe la condición natural del hombre luego de la caída. Debido a la transgresión de Adán, toda su descendencia hereda una naturaleza pecaminosa. El hombre está afectado por el pecado en todo su ser y es por completo un pecador; y para que se salve, Dios debe imputarle la justicia de Cristo. Esta justicia sólo es alcanzable por la fe en Cristo y Su obra en la cruz.

Dicotomía: la enseñanza de que un ser humano consta de dos partes: cuerpo y alma. El alma a veces se menciona asimismo como el espíritu.

Dios: es un Espíritu, infinito, eterno e inmutable, en su ser, sabiduría, poder, santidad, justicia, bondad y verdad (según Westminster Shorter Catechism, Catecismo Abreviado de Westminster). Dios es un ser personal no material, consciente de sí mismo y autodeterminante; es el ser supremo, creador, sostenedor y soberano del universo. Él es el creador de todas las cosas, (Isaías 44:24), el único Dios (Isaías 45:21,22; 46:9; 47:8). No ha habido dioses antes que Él ni los habrá después de Él (Isaías 43:10).

Discípulo: la palabra proviene de la misma raíz que «disciplina» y se refiere a un alumno o seguidor de una religión, persona o movimiento. Un discípulo es un cristiano que sigue a Jesucristo como Salvador y Señor, que está creciendo en la gracia y el conocimiento de Él, y que es un miembro responsable de su cuerpo, que es la iglesia. Jesucristo quiere discípulos que hayan considerado con seriedad la obra por Él hecha en la cruz (Lucas 14:26-27). Como discípulos, hemos de cargar nuestra cruz cada día (Mateo 16:24). Esto significa vivir por Él y de ser necesario, morir por Él (Mateo 16:25) y, desde luego, vivir vidas santas y sin mancha delante de Él y de nuestro prójimo.

Dispensación, dispensacionalismo: en la Biblia de Scofield se define una dispensación como «un período de tiempo durante el cual el hombre es probado con respecto a alguna revelación específica de la voluntad de Dios«. El dispensacionalismo es un sistema teológico que subraya que Dios ha empleado diferentes medios de administración de Su voluntad y Su gracia en diferentes períodos de la historia humana. De acuerdo a este sistema existen siete dispensaciones: Inocencia, Conciencia, Gobierno Humano, la Promesa, la Ley, la Gracia y el Reino Milenial.

Divinidad: es la naturaleza o cualidad propia de Dios. Le pertenece solamente al Dios que los cristianos predican, es decir, a la santa Trinidad. Jesús es de naturaleza divina (Colosenses 2:9) como asimismo de naturaleza humana.

Dones espirituales: son capacidades espirituales dadas por Dios con el propósito de edificar la Iglesia. Todo cristiano tiene al menos un don espiritual (1 Corintios 7:7). En diversas partes del N.T. se tratan y hay listas de dones: Romanos 12:6-8; 1 Corintios 12:4-11, 28-30; Efesios 4:7-12. A continuación hay una lista de dones dispuesta en dos grupos. El primer grupo comprende dones que requieren una intervención sobrenatural y son poseídos solamente por los cristianos. El segundo grupo incluye dones que no requieren intervención sobrenatural, y pueden ser poseídos tanto por cristianos como por no cristianos.

Edificar: significa construir: es infundir en alguien sentimientos de piedad y virtud. En el contexto cristiano se refiere a fortalecer o ser fortalecido en la relación con Dios, en el andar cristiano y en santidad. Como cristianos, hemos de cuidar que «todo se haga para edificación» (1 Corintios 14:26 LBLA).

Eficacia: es la capacidad de lograr el efecto que se desea o se espera, es la capacidad para producir un resultado. La expiación de Cristo fue eficaz, ya que produjo como resultado el perdón de los pecados de los elegidos (los que creen en Jesucristo). La expiación es la gracia eficaz en acción.

Elección, Elegidos: término que se utiliza en teología para designar el acto mediante el cual Dios toma para sí un pueblo (Israel) o una persona (el creyente). Son aquellos llamados por Dios para salvación. Esta elección ocurrió antes de la fundación del mundo (Efesios 1:4), y es conforme a la voluntad de Dios, no a la del hombre (Romanos 8:29-30; 9:6-23) porque Dios es soberano (Romanos 9:11-16).

Encarnación: puede definirse como la adición de una naturaleza humana a la naturaleza divina de la segunda Persona de la Trinidad; es el acto por el cual Dios, sin dejar de ser Dios, se hizo hombre (Juan 1:1,14; Fil. 2:5-8). La convicción de que Dios mismo vino y viene a la historia humana en la persona de Jesucristo. Jesucristo es Dios mismo en acción dentro de la historia para la salvación de los seres humanos, de manera única, final, adecuada e indispensable (Juan 3:16; 2 Corintios 5:19). Fue una decisión voluntaria y deliberada de Jesús, que se humilló a Sí mismo para poder morir por nuestros pecados (1 Pedro 3:18). Por tanto, Jesús tiene dos naturalezas: la divina y la humana. Esto se conoce técnicamente como Unión hipostática.

Escatología: del griego éskhatos: ‘último’ y logos: ‘estudio’. Es la rama de la teología que estudia las enseñanzas bíblicas concernientes al final de los tiempos, en particular del período relacionado con la Parusía o segunda venida de Jesucristo y los acontecimientos relacionados. Entre los temas escatológicos están el milenio, la atadura de Satanás, la tribulación, los dos Testigos, el Anticristo, la batalla de Armagedón, la resurrección de los muertos, el rapto de la iglesia, el juicio final y los nuevos cielos y tierra. Entre los capítulos predominantemente escatológicos del N.T. están Mateo 24, Marcos 13, Lucas 17 y 21, 1 Corintios 15, 1 Tesalonicenses 4-5, 2 Tesalonicenses 1-2 y 2 Pedro 3.

Escrituras: el término es un sinónimo de la Biblia; por tanto, se refiere, en sentido cristiano, al conjunto de los 39 libros del A.T. y los 27 libros del N.T. Cada uno de ellos es inspirado, libre de error, y completamente exacto en los temas que trata. La Biblia completa, aunque escrita por muchos autores humanos a lo largo de 16 siglos, es completamente coherente y armónica en todas sus enseñanzas; esto se debe a que toda la Biblia fue inspirada por Dios (2 Timoteo 3:16).

Espíritu Santo: es la tercera Persona de la Trinidad. Es absolutamente Dios. Es llamado Dios (Hechos 5:3-4), tiene voluntad (1 Corintios 12:11) y conoce todas las cosas (Juan 14:17), aún los más profundos misterios de Dios, los cuales revela a los creyentes (1 Corintios 2:10-16).

Evangelio: el término es una transliteración del griego εαγγέλιον, euangelion, que significa «buena noticia«. Es la buena noticia del perdón de los pecados y la reconciliación con Dios a través de Jesucristo. La palabra describe el mensaje del cristianismo y los libros en los cuales se encuentra el registro de la vida y las enseñanzas de Cristo. Este mensaje es las buenas nuevas que Dios ha provisto una forma de redención por medio de su Hijo Jesucristo. Por medio del evangelio el Espíritu Santo obra para la salvación de los seres humanos (Romanos 1:15-16).

En el N.T. la palabra nunca significa un libro (uno de los cuatro Evangelios), sino las buenas nuevas anunciadas por Cristo y los apóstoles. Pablo da la siguiente descripción en 1 Corintios 15:1-4: «Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras«.

Evolución: la palabra viene del latín evolvere, desarrollarse, y básicamente se refiere a cualquier proceso de cambio en el tiempo. Teoría que afirma que todas las formas de vida animal y vegetal existentes se desarrollaron de manera gradual a partir de formas anteriores genéticamente más simples, mediante una extensa serie de transformaciones menores. Sostiene que el desarrollo de todas las formas de vida tiene lugar a través de una serie de modificaciones, cuya dirección y sentido están gobernados por factores ambientales. Esta teoría fue propuesta por Charles Darwin en su obra El origen de las especies (1859). Las Escrituras no hablan del origen de la vida como un proceso evolutivo, sino que parecen negar la teoría al afirmar que Dios creó todas las cosas (Génesis 1).

Expiación: es la cancelación del pecado. Acto por el cual, mediante un sacrificio, se busca que Dios sea propicio, satisfaciendo su justicia, borrando la culpa, purificando el alma y reconciliándola con Él. En el A.T., con los sacrificios se reconocía que Dios estaba airado contra el pecado y que se hacía aquello con el propósito de apaciguarlo, o ponerlo en disposición favorable, o hacerlo propicio. También el hombre reconocía su culpa y trataba de eliminarla, o purificarse, o expiarla. El sacrificio, entonces, procuraba cargar sobre una víctima inocente la ira de Dios (expiar) y ponerle en actitud favorable hacia el hombre (propiciar).

Fe: la palabra viene del latín fides, creer, confiar. Actitud de confianza, convicción y entrega a un ser divino o a una enseñanza religiosa. Tiene que ver con la orientación total de la persona, que puede involucrar también las creencias de una religión, pero que básicamente se expresa como confianza o lealtad. Se utiliza en la Biblia con dos sentidos principales: en el primero, es sinónimo de confianza firme: «Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve» (Hebreos 11:1). Como tal, es un don de Dios (Romanos 12:3) y viene por el oír la Palabra de Dios (Romanos 10:17).

La fe es el medio por el cual la gracia de Dios es otorgada al creyente que confía en la obra de Jesús en la cruz (Efesios 2:8). Sin fe es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6). Es por fe que vivimos nuestra vida de cristianos, «El justo vivirá por la fe» (Hab. 2:4; Romanos 1:17). En el segundo sentido, fe es sinónimo de doctrina, o conjunto de verdades históricas y conceptuales que configuran la fe cristiana: «me ha sido necesario escribiros para exhortaros a que contendáis ardientemente por la fe que ha sido dada una vez a los santos» (Judas 3).